Finlandia actualmente utiliza el capitalismo como sistema económico actual, es el séptimo país con el Índice de Libertad Económica más alto. Tradicionalmente, Finlandia ha sido un
importador neto de capital para financiar el crecimiento industrial. Desde la
década de 1980, la tasa de desarrollo económico de Finlandia ha sido una de las
más altas de los países industrializados. Aunque consigue resistir los primeros
años de la crisis económica surgida en 2008 finalmente en 2013
empieza la caída que se acentúa en principios del 2015.
Los sectores económicos más dinámicos de Finlandia son
la industria de la madera, los metales, la ingeniería, las
telecomunicaciones y las industrias de la electrónica, junto al diseño.
A excepción de la madera y de algunos minerales, Finlandia depende de las
importaciones para abastecerse de materias primas, energía, y de algunos
componentes para los productos manufacturados. Debido al clima, el desarrollo agrícola se
limita a la autosuficiencia en productos básicos. La silvicultura, tiene
importancia para la exportación y proporciona una ocupación secundaria para la
población rural.
Finlandia se incorporó a la Unión Europea en 1995 y
en 1999 se integró en la Eurozona,
adoptando como moneda el euro.
El PIB de Finlandia en el 2013 fue de USD$267,300,000,000 (Doscientos
sesenta y siete mil trescientos millones de dólares).